La escalada de la violencia en Siria sigue causando muertes de refugiados de Palestina y destruyendo viviendas civiles

El 4 de junio, a las 15:30 horas, Bara Mahmoud Hosin Jomaa, de unos 14 años, resultó muerta en la zona de Al Hamadaniyeh de la ciudad de Alepo, cuando un cohete impactó su casa, en medio de unos ataques que dejaron decenas de muertos y heridos. El 5 de junio, aproximadamente a las 10:30 horas, Khairieh Zohir Siam, de 41 años, fue alcanzada por una bala de rifle de un francotirador, mientras viajaba en un minibús comercial en la zona de Al Ramoseh, también en Alepo. Murió en el acto, mientras que otro refugiado de Palestina, compañero de viaje, fue herido en la mano y el cuello. UNRWA condena enérgicamente a los responsables de estas muertes y muestra sus condolencias con las familias de las víctimas.

En el campamento de Khan Eshieh, al sur rural de Damasco, los intensos combates con uso de armas y munición pesada siguen poniendo en peligro la vida de los refugiados de Palestina y dañan y destruyen casas de civiles. El 4 de junio, poco antes de las 13:00 horas, la casa de un refugiado palestino fue alcanzada y dañada seriamente por un explosivo. Esto después de que el 27 de mayo un niño refugiado de 6 años muriera por explosión de artillería, y de que otros cinco refugiados de Palestina perdieran la vida en dos ataques dentro del campamento de Khan Eshieh el 17 de mayo.

UNRWA sigue profundamente preocupada por el riesgo que la guerra supone para sus refugiados y otros civiles en toda Siria. La Agencia reitera sus exigencias a todas las partes para que se abstengan de exponer a la población civil a estos riesgos. Para salvar vidas civiles, considera imperativo que todas las partes respeten y cumplan sus obligaciones con el derecho internacional humanitario.

Información de fondo sobre el campamento de Khan Eshiesh

UNRWA proporciona en Siria apoyo humanitario vital y servicios de salud y educación a 450.000 refugiados de Palestina, de los cuales dependen más del 95% de ellos.

En la gobernación de Alepo, la Agencia presta servicio a unos 25.000 refugiados de Palestina que residen en la ciudad de Alepo y el campamento de Neirab. Muchos de estos refugiados han experimentado el desplazamiento. En el campamento de Ein el Tal (Handarat), situado al norte de la ciudad y hogar de alrededor de 7.000 personas, los grupos armados entraron en abril de 2013, desplazando a la fuerza a toda la población en un periodo de 48 horas y causando grandes daños. Neirab, al sureste de la ciudad de Alepo y situado junto a un aeropuerto, aloja a 15.000 refugiados, entre ellos los desplazados de Ein El Tal, quienes llevan experimentando los efectos de los conflictos armados en mayor o menor intensidad desde 2012.

El campamento de Khan Eshieh, que alberga a 9.000 refugiados de Palestina, está situado en una zona inestable de la zona rural del sur de Damasco, donde los brotes de violencia han causado la muerte de siete refugiados de Palestina en las últimas dos semanas. Desde 2012, las granjas y campos alrededor del campamento han sido zona activa de batalla en donde el uso de armas pesadas ha sido regular e indiscriminado. 75 trabajadores de UNRWA residentes en el campamento se esfuerzan por mantener el apoyo a los refugiados de Palestina a través de servicios limitados en tres escuelas, un centro de salud y un centro comunitario. La labor de la Agencia se ve obstaculizada por el hecho de que, desde 2013, el acceso humanitario a Khan Eshieh se ha visto limitado. Para recibir asistencia, los refugiados de Palestina deben viajar con gran riesgo personal a nuetros centros de distribución en Khan Sahnaya o Dannoun.

UNRWA, la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Medio, lamenta profundamente la escalada del conflicto armado en Siria, que en los últimos días se ha cobrado la vida de dos refugiados de Palestina en la ciudad de Alepo y continúa poniendo en grave riesgo su seguridad en el campamento de Khan Eshieh, al sur de Damasco.

UNRWA, la Agencia de Naciones Unidas para los refugiados de Palestina

En 1948, 700.000 palestinos fueron despojados de sus tierras, sus hogares y de sus recuerdos, convirtiéndose en refugiados. Hoy son más de 5 millones, casi la tercera parte de los refugiados del mundo.

Después de más de 60 años de exilio y condición apátrida, en los que las condiciones de los refugiados de Palestina lejos de mejorar se han agravado, UNRWA gestiona 58 campamentos de refugiados donde presta asistencia, protección y defensa a 5 millones de refugiados de Palestina en la franja de Gaza, Cisjordania, Jordania, Líbano, y Siria, en espera de una solución pacífica y duradera a su difícil situación.

UNRWA se financia casi en su totalidad por las contribuciones voluntarias y el apoyo financiero no ha ido a la par con una mayor demanda de servicios causados por el creciente número de refugiados registrados, la profundización de la pobreza, y los conflictos. Como resultado, el Fondo General de la Agencia, que apoya a los servicios esenciales básicos y la mayoría de los gastos de personal, opera con un déficit grande. Programas de emergencia y proyectos clave también operan con grandes déficits pero se financian a través de portales de financiación independientes.

UNRWA es un organismo de las Naciones Unidas establecido por la Asamblea General en 1949 y el mandato de prestar asistencia y protección a unos 5 millones de refugiados de Palestina registrados en Jordania, Líbano, Siria, Cisjordania y la Franja de Gaza, para que alcancen su pleno potencial de desarrollo humano en espera de una solución justa a su difícil situación. Los servicios de UNRWA abarcan la educación, la salud, socorro y servicios sociales, la infraestructura y mejora de los campamentos, y las microfinanzas.

UNRWA España trabaja con el objetivo de apoyar los programas humanitarios de UNRWA y sensibilizar sobre la situación de la población refugiada de Palestina a la sociedad española.