UNRWA y los ODS

En 2015 los líderes mundiales aprobaron unánimemente la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) entraron oficialmente en vigor el 1 de enero de 2016 y proporcionan un marco común para abordar los retos globales, incluyendo la pobreza, la desigualdad, la degradación del medio ambiente, el cambio climático y la paz y la justicia. UNRWA realiza una aportación directa a muchos de estos objetivos en sus cinco áreas de actuación para que la población refugiada de Palestina no quede atrás.

Al invertir en el capital humano de las personas refugiadas de Palestina, UNRWA contribuye activamente a la realización de la Agenda 2030. Como el mayor proveedor de servicios directos a la población refugiada de Palestina en sus áreas de operaciones, el impacto de UNRWA es concreto y sostenido, siendo los siguientes Objetivos de Desarrollo Sostenible centrales en nuestro trabajo: ODS 1: No a la pobreza; ODS 2: Hambre cero; ODS 3: Buena salud y bienestar; ODS 4: Educación de calidad; ODS 5: Igualdad de género; ODS 6: Agua limpia y saneamiento; ODS 8: Trabajo decente y crecimiento económico; ODS 10: Reducción de las desigualdades; ODS 13: Acción por el clima; y ODS17: Alianzas.

El compromiso de UNRWA con los ODS también se refleja en su Estrategia a Medio Plazo 2016 -2021. Al igual que los ODS, la estrategia de UNRWA refleja que el progreso en el desarrollo humano para las personas refugiadas de Palestina requiere un enfoque multidimensional que incluye el alivio de la pobreza, el respeto por los derechos humanos, el acceso a servicios de salud y educación de calidad, la reducción de la desigualdad y el crecimiento económico.

La erradicación de la pobreza y el respeto de los derechos humanos, pilares centrales de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), son también el núcleo del trabajo de desarrollo humano, humanitario y de protección de UNRWA. Desde su creación en 1949, la Agencia ha hecho una contribución significativa al desarrollo humano y la protección de generaciones de refugiados y refugiadas de Palestina, fomentando la autosuficiencia y aliviando el sufrimiento en tiempos de crisis. UNRWA es ampliamente reconocida como una importante fuente de estabilidad en una región golpeada por la crisis.

Los ODS exigen la erradicación de la pobreza en todas sus formas y dimensiones para 2030. La pobreza sigue siendo prevalente entre las personas refugiadas de Palestina, y afecta especialmente a las que sufren el impacto de los conflictos en Gaza y Siria, la ocupación en Cisjordania, el bloqueo en Gaza y la exclusión social y económica en Líbano. Desde UNRWA hemos adoptado un enfoque holístico para hacer frente a la pobreza y a los efectos devastadores asociados a más de 70 años de desplazamiento. El acceso a atención sanitaria primaria gratuita, educación básica, oportunidades de subsistencia, servicios sociales y de emergencia, vivienda y salud ambiental son fundamentales para garantizar que la población refugiada de Palestina cuente con los elementos básicos para superar la naturaleza multidimensional de la pobreza.

El derecho a la alimentación es el más básico de los derechos humanos. Por eso, en UNRWA salvaguardamos este derecho a través de la provisión de asistencia en efectivo y alimentos básicos a las personas refugiadas de Palestina más vulnerables que, de otro modo, no podrían satisfacer sus necesidades de consumo de alimentos. También proporcionamos ayuda de emergencia en efectivo y alimentos en tiempos de crisis para reducir el sufrimiento de las familias afectadas.

La cobertura sanitaria universal significa que todas las personas tienen acceso a los servicios sanitarios de calidad que necesitan, cuando y donde los necesitan, sin dificultades financieras. En su núcleo está la atención primaria de salud, que consiste en cuidar a las personas y ayudarlas a mejorar su salud o mantener su bienestar, en lugar de limitarse a tratar una sola enfermedad o condición. UNRWA ha sido el principal proveedor de atención primaria de salud para los refugiados y refugiadas de Palestina durante 70 años, al tiempo que ayuda a los más vulnerables a acceder a la atención secundaria y terciaria. Con 141 centros de salud y unos 3.000 trabajadores sanitarios en sus cinco áreas de operación, realizamos más de 8,5 millones de consultas de atención primaria al año.       

Desde que inició sus operaciones en 1950, en UNRWA hemos formado a más de dos millones y medio de niñas y niños refugiados en el marco de un programa reconocido como una importante fuerza educativa en Oriente Próximo. La educación de calidad ayuda a la juventud refugiada de Palestina a entender el mundo en el que vive y promueve los valores de tolerancia, identidad cultural e igualdad de género. A través de su sistema educativo, la Agencia pretende que los alumnos y alumnas refugiadas de Palestina desarrollen todo su potencial y se conviertan en personas seguras de sí mismas, innovadoras, críticas, reflexivas y de mente abierta que defiendan los derechos humanos, estén orgullosas de su identidad palestina, y contribuyan positivamente al desarrollo de la sociedad y de la comunidad global.

UNRWA ha integrado la igualdad de género y el empoderamiento en todo su trabajo de desarrollo humano desde el inicio de las operaciones en 1950 y continúa haciéndolo hoy en día. En la última década, la Agencia también ha tomado medidas significativas para integrar el género, la violencia de género y las medidas de protección en su respuesta de emergencia.    

El acceso a agua potable y a un saneamiento básico es esencial para la vida humana y proporciona los cimientos para una buena salud y un nivel de vida adecuado. Casi un tercio de la población refugiada de Palestina vive en 50 campamentos repartidos entre las cinco áreas de operaciones de UNRWA. Aunque inicialmente fueron asentamientos temporales, estos campamentos se han convertido en espacios muy edificados con un suministro de agua y condiciones de saneamiento inadecuados. Mediante su Programa de Infraestructuras y Mejora de Campamentos la Agencia pretende garantizar que las condiciones de vida de los campamentos cumplan unos estándares mínimos, priorizando proyectos de redes de suministro de agua y saneamiento que se han visto afectadas por años con déficit de planificación y recursos. UNRWA proporciona agua y saneamiento para los campamentos, incluyendo la gestión de residuos sólidos y servicios de gestión y rehabilitación de las redes de suministro de agua y saneamiento.

La población refugiada de Palestina se enfrenta a altos niveles de desempleo. Entre la población joven, especialmente las mujeres, los niveles de desempleo son muy alarmantes. Gaza sufre una de las tasas de desempleo más altas del mundo como resultado del bloqueo, mientras que en Cisjordania, incluyendo Jerusalén Este, la ocupación israelí y su arraigado sistema de restricciones de acceso y movimiento continúan sofocando el crecimiento económico, limitando el acceso de los palestinos y palestinas a la tierra, los mercados y las oportunidades de subsistencia. En Siria, el conflicto en curso ha devastado la economía, y en Líbano, las personas refugiadas de Palestina se encuentran entre las más vulnerables y marginadas, ya que se les prohíbe el acceso a muchas profesiones y se enfrentan a la discriminación en el mercado laboral. En Jordania, el desempleo sigue siendo un reto importante y los jóvenes son los más afectados.

Desde UNRWA promovemos la creación de medios de vida mediante la construcción del capital humano de los refugiados y refugiadas de Palestina y el acceso a oportunidades de generación de ingresos y empleo. Desde 1991, el programa de microfinanciación de la Agencia ofrece créditos y servicios financieros a hogares, personas emprendedoras y propietarias de pequeñas empresas para crear y mantener puestos de trabajo, reducir la pobreza y empoderarlas. Además, nuestro programa de formación profesional prepara a los y las jóvenes para alcanzar su potencial y acceder al mercado laboral.

UNRWA también desempeña un papel en la creación de empleo principalmente como un importante empleador y a través de programas de emergencia de dinero por trabajo en Gaza y Líbano, así como de mejora de los campamentos

El cambio climático afecta a todos los países del mundo, impactando las economías, comunidades e individuos, siendo las personas más pobres y vulnerables las más afectadas. Aunque las áreas en las que operamos no son las que más contribuyen al cambio climático, siguen siendo extremadamente vulnerables a sus impactos. En todos sus ámbitos de actuación, desde UNRWA desempeñamos un papel clave en el tratamiento de los problemas de protección del medio ambiente dentro de la comunidad refugiada de Palestina y cumplimos con la obligación de minimizar el impacto ambiental negativo de nuestras propias operaciones.

Estamos comprometidos con el desarrollo de la capacidad del personal en el área de la gestión ambiental y estamos abordando la protección del medio ambiente en el uso de la energía, la construcción y las obras de rehabilitación de viviendas con un enfoque específico en el uso de tecnologías verdes. Además, se está dando prioridad a una serie de esfuerzos de protección del medio ambiente que incluyen la instalación de equipos de ahorro de energía, como paneles solares, calentadores de agua y accesorios LED, en una serie de escuelas, centros de salud y otras instalaciones, así como la eliminación segura de los residuos médicos. También se están adoptando medidas para proteger los recursos hídricos y mejorar la salud medioambiental en los campamentos de refugiados de Palestina.

Las actividades de protección que llevamos a cabo desde UNRWA responden a las necesidades de las personas refugiadas de Palestina en una situación de aumento de los conflictos y los desplazamientos en la región. El conflicto de Siria ha desplazado a miles de personas refugiadas de Palestina, entre ellas decenas de miles a Jordania y Líbano, mientras que Gaza ha soportado repetidos episodios de hostilidades y violencia. Los más de 50 años de ocupación del territorio palestino por Israel, incluyendo más de diez años de bloqueo de Gaza, han tenido graves y duraderas consecuencias sobre el disfrute de los derechos humanos por las personas refugiadas de Palestina.

Por eso, hemos fortalecido significativamente nuestra capacidad de ofrecer protección a las personas refugiadas de Palestina mediante diversas iniciativas. Incluyendo formación en protección de nuestro personal, actividades específicas de protección para garantizar el énfasis en los más vulnerables, y la introducción de personal específico de protección en todas las áreas de operaciones de la Agencia.

Las alianzas son un elemento fundamental de la agenda 2030 ya que los objetivos globales sólo podrán alcanzarse con un sólido compromiso por las alianzas y la cooperación. Las alianzas son también un importante componente del enfoque de UNRWA para satisfacer las necesidades humanitarias y de desarrollo humano de las personas refugiadas de Palestina. Desde UNRWA hemos establecido alianzas estratégicas a largo plazo con la UNESCO y la OMS para la gestión de sus programas de educación y salud. La combinación del carácter operativo de la Agencia y los conocimientos técnicos y el liderazgo de la UNESCO y la OMS han supuesto una aportación crucial en la provisión de servicios de educación y salud a millones de personas refugiadas de Palestina. Estas alianzas nos ayudan a garantizar que los ODS están incorporados adecuadamente a los programas de UNRWA y han permitido que hagamos aportaciones sustantivas al bien público global. UNRWA también ha establecido alianzas con varias otras agencias de Naciones Unidas y ONG.