UNRWA lanza una llamada de emergencia de $93 millones para frenar el impacto del coronavirus entre la población refugiada de Palestina
8.5.2020
de información
8.5.2020
Desde el comienzo de la crisis, UNRWA ha trabajado sin descanso para prestar servicios vitales a las personas refugiadas de Palestina en todo Oriente Medio.
La Agencia de Naciones Unidas para la población refugiada de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA) necesita urgentemente 93,4 millones de dólares para su respuesta al COVID-19 en los ámbitos de atención sanitaria, saneamiento e higiene y educación durante los próximos tres meses. La cantidad solicitada es una actualización del anterior llamamiento de la Agencia, en el que una gran parte de los fondos se destinan a cubrir la asistencia en efectivo y alimentaria a esta población especialmente vulnerable, ya que las consecuencias socioeconómicas de la crisis de salud pública siguen pesando mucho en los hogares.
Desde el comienzo de la crisis, UNRWA ha trabajado sin descanso para prestar servicios esenciales y vitales a las personas refugiadas de Palestina en todo Oriente Medio. Se han distribuido equipos de protección personal a miles de miembros del personal sanitario de primera línea, y se han introducido sistemas de triaje en todos los centros de salud para examinar a los pacientes con síntomas respiratorios y reducir al mínimo el contacto con otros pacientes. Se han suspendido los servicios sanitarios no críticos y se ha introducido la prestación de servicios de telemedicina y la entrega, puerta por puerta, de medicamentos y alimentos para reducir los desplazamientos y aglomeraciones en las clínicas de salud y los centros de distribución de alimentos.
A fin de garantizar la continuidad de la educación de más de 530.000 estudiantes matriculados en las escuelas de UNRWA y de 8.270 jóvenes en los centros de formación profesional, el enfoque de la Educación en Situaciones de Emergencia de la Agencia, desarrollado en respuesta a los conflictos en Siria y Gaza, se ha ajustado a la crisis de COVID-19 y se ha puesto en práctica. Para evitar cualquier peligro adicional para la salud pública, se han seguido realizando trabajos de saneamiento y recogida de desechos sólidos en todos los campamentos, y se han incrementado las medidas de protección de los trabajadores del sector de saneamiento. La Agencia continúa con sus programas vitales de asistencia alimentaria y en efectivo para los más vulnerables.
“Hemos visto cómo la crisis está golpeando desproporcionadamente a las comunidades más pobres y vulnerables de todo el mundo. Lamentablemente, esto también es cierto para las personas refugiadas de Palestina, que se encuentran entre las poblaciones más vulnerables de Oriente Medio”, dijo el Comisionado General de UNRWA, Philippe Lazzarini. “La mayoría de los refugiados y refugiadas a los que atiende UNRWA viven por debajo del umbral de pobreza y carecen de la red de seguridad necesaria para absorber las conmociones financieras y médicas creadas por la pandemia de COVID-19. Ahora se enfrentan a consecuencias devastadoras para su bienestar físico, social y económico”.
El llamamiento de emergencia de UNRWA servirá para prevenir una situación desastrosa que podría poner miles de vidas en riesgo y protegerá contra los efectos más graves de la pandemia al atender necesidades básicas como la alimentación, el agua y la atención sanitaria vital, y prevenir un mayor deterioro de la salud y la seguridad socioeconómica de las personas refugiadas.
“Mientras persista la crisis mundial, UNRWA seguirá adaptando su funcionamiento para responder a las necesidades y expectativas de los refugiados y refugiadas de Palestina. Cuento con la solidaridad de la comunidad internacional para ayudarnos a garantizar que las personas refugiadas de Palestina permanezcan seguras y puedan hacer frente a la crisis económica que podría empujar a esta comunidad vulnerable al borde del desastre”. Esto podría desencadenar más inestabilidad en una región ya de por sí volátil”, dijo Lazzarini.
En 1948, 700.000 palestinos fueron despojados de sus tierras, sus hogares y de sus recuerdos, convirtiéndose en refugiados. Hoy son 6 millones, casi la cuarta parte de los refugiados del mundo.
Después de más de 70 años de exilio y condición apátrida, en los que las condiciones de las personas refugiadas de Palestina lejos de mejorar se han agravado, UNRWA gestiona 58 campamentos de refugiados donde presta asistencia, protección y defensa a 6 millones de refugiados de Palestina en la franja de Gaza, Cisjordania, Jordania, Líbano, y Siria, en espera de una solución pacífica y duradera a su difícil situación.
UNRWA se financia casi en su totalidad por las contribuciones voluntarias y el apoyo financiero no ha ido a la par con una mayor demanda de servicios causados por el creciente número de refugiados registrados, la profundización de la pobreza, y los conflictos. Como resultado, el Fondo General de la Agencia, que apoya a los servicios esenciales básicos y la mayoría de los gastos de personal, opera con un déficit grande. Programas de emergencia y proyectos clave también operan con grandes deficits pero se financian a través de portales de financiación independientes.
UNRWA es un organismo de las Naciones Unidas establecido por la Asamblea General en 1949 y el mandato de prestar asistencia y protección a unos 5 millones de refugiados de Palestina registrados en Jordania, Líbano, Siria, Cisjordania y la Franja de Gaza, para que alcancen su pleno potencial de desarrollo humano en espera de una solución justa a su difícil situación. Los servicios de UNRWA abarcan la educación, la salud, socorro y servicios sociales, la infraestructura y mejora de los campamentos, y las microfinanzas.
UNRWA España trabaja con el objetivo de apoyar los programas humanitarios de UNRWA y sensibilizar sobre la situación de la población refugiada de Palestina a la sociedad española.