Ghada Na’ana, madre de 8 hijos: “el Programa de Creación de Empleo de UNRWA me ha salvado la vida”
10.08.2015En una gran tienda de campaña en una granja de claveles en Rafah, en el sur de Gaza, alrededor de 15 mujeres están sentadas en una gran mesa apilada con flores de color rojo, amarillo, blanco púrpura… en silencio, se concentran en los ramos, que envuelven en papel brillante transparente. Las mujeres, contratadas a través del Programa de Creación de Empleo de UNRWA, empiezan recogiendo las flores de los grandes macizos en las primeras horas de la mañana, y más tarde, cuando el calor aprieta en exceso, se retiran a la tienda, un poco más fresca, para empaquetar el clavel y prepararlo para el mercado local de Gaza.
Ghada Na’ana, de 34 años y madre de ocho hijos, está muy feliz de poder trabajar en esta granja junto con otras mujeres: “la oportunidad de trabajar aquí me ha salvado la vida. Mi marido me dejó hace tres años por otra mujer. Soy el único apoyo de mis hijos. Sobrevivimos gracias a la ayuda alimentaria que recibimos de UNRWA”, añade.
“Esta es la primera vez que puedo decir que salgo de mi casa para ir a trabajar. Estoy muy contenta de reunirme con otras personas y he hecho muchos amigos. También es hermoso trabajar y estar rodeada de flores”, dice Zaher Al Mugheir (30 años). “Este trabajo me permite hacer algunos trabajos de mantenimiento en mi casa, y soy capaz de comprar ropa nueva para mis hijos para las vacaciones del Eid”, agrega con orgullo.
El apoyo del Programa de Creación de Empleo proporcionado al sector agrícola tiene como objetivo mejorar la calidad y la salida de la producción mediante el aumento de la mano de obra para ayudar con los cultivos de plantación, mantenimiento y cosecha, y reducir los costos de mano de obra que, presumiblemente, se traduce en una reducción de los costos de mercado para el consumidor y, en última instancia, contribuye a la seguridad alimentaria local. Al mismo tiempo, el apoyo de este programa al sector agrícola también contribuye a abordar el problema del desempleo femenino no cualificado. En el primer trimestre de 2015, el desempleo femenino en Gaza alcanzó el 55’2%, según la Oficina Central de Estadísticas palestina.
El sector agrícola de Gaza se ha visto gravemente afectado por el bloqueo impuesto en el año 2007. A pesar de un alto potencial para el comercio, las exportaciones actuales siguen siendo mínimas debido a la gran restricción del bloqueo a la circulación de mercancías.
Raza Hijazi, el propietario de la finca donde Ghada y Zaher están trabajando, también sale beneficiado por su parte: “es la primera vez que UNRWA ayuda a mi negocio proporcionándome trabajadores y realmente me va a hacer ahorrar mucho dinero. Antes del bloqueo, exportábamos muchas flores a Europa, pero desde el año 2007 el negocio está por los suelos y no hay exportación”, comenta . Antes del mencionado bloqueo, Hijazi empleaba a 20 trabajadores, pero ya no es capaz de contratar más que a tres por ahora. Ibrahim Siham, propietario de otra granja cerca, está de acuerdo: “en los últimos años he tenido que recortar fuertemente los empleados. El Programa de Creación de Empleo me ayuda a aumentar mi negocio y el dinero que ahorro de esta manera lo invierto en la plantación para que mi negocio pueda crecer, con suerte”, dice.
Desde 2006, la Agencia ha creado 18.385 oportunidades en el sector agrícola (6.350 mujeres y 12.035 hombres), 2.571 de ellas en el sector del clavel. En 2014, se emplearon un total de 20.545 refugiados a través de este programa, con el que UNRWA inyecta 18’1 millones de dólares a la economía de Gaza. En el primer trimestre de 2015, la Agencia ha creado 12.646 oportunidades e inyectado 7 millones de $.