El campo de Balata fue establecido en 1950 y se ha convertido en el mayor campamento de refugiados de Cisjordania en términos de habitantes, con más de 23.000 refugiados registrados. El campamento de 0,252 kilómetros cuadrados se encuentra dentro de los límites municipales de Nablus. Los refugiados y refugiadas proceden originalmente de 60 pueblos y de las ciudades de Lydd, Jaffa y Ramleh. Muchos son de origen beduino.
Balata refugee camp. © 2015 UNRWA Photo by Dominiek Benoot
La sociedad civil y actores políticos en Balata son especialmente activos. Ha sido el primer grupo de Cisjordania en defender los derechos de los refugiados, creando para ello un Comité de Defensa de los Derechos de Refugiados a principios de 1994. El Comité del campamento es uno de los comités más activos en la zona, tres de sus miembros participan en el Consejo Legislativo Palestino. El centro de actividades juveniles y el centro para la mujer organizan también muchas actividades. El campo cayó bajo una fuerte presión del ejército israelí durante la intifada.
Balata refugee camp. © 2015 UNRWA Photo by Dominiek Benoot
Si bien todos los refugios están conectados a servicios públicos de agua y de electricidad a través de la Municipalidad de Nablus, hay graves problemas de agua y en la red de alcantarillado. En verano, los sistemas de distribución de agua sólo trabajan cuatro días por semana, y el depósito local de UNRWA proporciona un alivio limitado.