Yasser Al-Sajed: “No puedo expresar con palabras la felicidad que sentí al recibir mi primer sueldo”
19.07.2018Haneen Atallah. Gaza. Julio 2018.
Yasser Al-Saied tiene 26 años y vive junto a su familia en el campamento Bureij en Gaza. Las personas que le conocen desde pequeño afirman que Yasser tiene una gran personalidad, seguridad en sí mismo y predisposición al liderazgo. Sus habilidades para la persuasión le fueron muy útiles para sacar el grado en Comunicación y Relaciones Públicas. Actualmente, Yasser estudia Relaciones Internacionales en la Universidad Al-Aqsa.
Desde que comenzó los estudios en la universidad, Yasser ha formado parte de varios programas de voluntariado. “Observaba mi entorno cercano y veía cómo las personas jóvenes no tenían empleo”, nos cuenta Yasser. “Decidí hacerme voluntario para ganar experiencia, aprender cosas y mostrar que tengo iniciativa”.
Aunque todavía no trabajaba, Yasser estaba muy motivado por lo que podía extraer de la experiencia: nuevas habilidades y conocimientos, relaciones personales y responsabilidad.
“Ser voluntario me hacía sentir productivo en la comunidad, pero cuando me gradué ya no era suficiente. Quería ser económicamente independiente y no recibir nada de mi familia”, explica Yasser. “Mi primer empleo remunerado fue como administrador en las Summer Fun Weeks de UNRWA. No puedo expresar con palabras la felicidad que sentí al recibir mi primer sueldo.”
Según la Oficina Palestina de Estadística, la tasa de desempleo en Gaza era del 46,6 por ciento en el tercer trimestre de 2017. Aún más preocupante, el 71 por ciento de las mujeres en Gaza están desempleadas. A través del Programa de Creación de Empleo de UNRWA, la Agencia trabaja para mitigar el impacto del colapso de la economía y el mercado laboral proporcionando oportunidades de empleo para los refugiados de Palestina.
Yasser confía firmemente en el rol de los jóvenes en la sociedad y, por ello, sigue siendo un miembro muy activo en su comunidad. Junto a amigos y amigas, Yasser ayuda en su vecindario con distintas iniciativas como la limpieza de calles y playas, el apoyo a personas de la tercera edad y distintas labores de reciclaje.
“Veo a mis dos hermanas que estudian en la universidad y me preocupo por su futuro”, reconoce Yasser. “Espero que la situación económica en Gaza cambie pronto para que las personas jóvenes consigan buenos trabajos”.