Vuelta a las clases agridulce en las escuelas de UNRWA en Cisjordania, Siria, Líbano y Jordania

La vuelta al cole en Oriente Próximo llega y el alumnado refugiado de Palestina en Cisjordania, Siria, Líbano y Jordania se prepara para su regreso a las aulas, un momento que siempre ha sido especial y llegaba cargado de esperanza. En los últimos días, miles de niños y niñas han sido recibidos en nuestras escuelas por nuestros profesionales educativos para el nuevo curso escolar.

En este inicio curso, mucha atención está puesta en Gaza, done la violencia impide que más de 600.000 estudiantes regresen a sus escuelas con normalidad. Pero no solo la Franja se enfrente a desafíos, el resto de las regiones donde trabajamos también están inmersas en duras circunstancias.

En Jordania, 113.485 alumnos acuden a escuelas de UNRWA masificadas y con escasos recursos. En Líbano, 40.000 niños y niñas sufren un grave deterioro de los entornos educativos por la crisis económica. En Siria, casi 50.000 estudiantes a los que brindamos educación se enfrentan a dificultades exacerbadas por el conflicto sirio y la inestabilidad.

En Cisjordania, preocupa especialmente la violencia, que ha ido en aumento desde octubre de 2023. Desde entonces, 150 niños han sido asesinados. Los 46.024 estudiantes que acuden a escuelas de UNRWA en toda Cisjordania, incluida Jerusalén Este, se enfrentan a violentas operaciones militares, restricciones de movimientos y traumas.

La semana pasada, justo cuando los estudiantes debían regresar a las aulas, 6.000 niños y niñas que asistían a nuestras escuelas en la zona norte de Cisjordania han visto interrumpidas sus clases debido a las violentas operaciones militares israelíes.

Para hacer frente a estas adversidades, desde la Agencia hemos trabajado para desarrollar una campaña educativa que dé repuesta a las necesidades del alumnado refugiado de Palestina en mitad de tantos desafíos y con las particularidades requeridas según la región.

Nuestros equipos se han preparado para que esta vuelta a la escuela en Cisjordania, Siria, Líbano y Jordania sea un momento de alivio para las familias refugiadas de Palestina, especialmente para el alumnado. Para los menores, las aulas representan un lugar seguro, donde aprender, formarse y lograr un futuro más esperanzador. 

En definitiva, nuestras escuelas en estas regiones están listas para ofrecer un espacio de protección y de paz y un respiro al alumnado. Además de educación para impulsar su potencial, nuestros equipos también trabajarán para proporcionarles apoyo psicosocial y mejorar su bienestar.