REFUGIADOS DEL CAMPAMENTO DE EIN EL HILWEH OBLIGADOS A HUIR EN BUSCA DE SEGUIRDAD 

A pesar del alto al fuego, los enfrentamientos han continuado en el campamento de Ein El Hilweh. La situación sigue siendo muy volátil, ya que llevamos cuatro días de violencia en el empobrecido campamento, al sur de Líbano. “Los grupos armados han dejado 13 muertos y más de 60 heridos. Miles se han visto obligados a huir de sus hogares dañados o destruidos”, comenta Dorothee Klaus, Directora de UNRWA en Líbano.  

Durante los combates se utilizó una de las escuelas de UNRWA dentro del campamento que brinda educación a 3.200 niños. La ciudad de Saida, la tercera más grande de Líbano se cerró, ya que los bombardeos y el fuego de artillería alcanzaron sus áreas comerciales y residenciales. 

UNRWA, con sus socios, alberga actualmente a 600 personas desplazadas del campamento en dos de sus escuelas en el campamento de Mieh Mieh y la ciudad de Saida, y está proporcionando combustible a un hospital en Ein El-Hilweh. “No hemos podido entrar en el campamento para hacerles llegar la asistencia que tanto necesitan. Un total de 360 ​​miembros del personal de UNRWA viven dentro. Algunos han quedado atrapados, uno ha resultado herido, otros han huido y algunos continúan trabajando para responder a las necesidades en el campamento”. 

Los refugiados y refugiadas de Ein El Hilweh están reviviendo traumas. Muchos han sido desplazados varias veces en las últimas décadas. UNRWA pide el cese inmediato de los combates en el campamento para que los civiles tengan un respiro y para que la Agencia pueda brindar asistencia y realizar evaluaciones de las necesidades. Hacemos un llamamiento también a la protección de todas las escuelas y otras instalaciones de UNRWA en todo momento.