Preparando a la juventud refugiada de Palestina en Jordania para trabajar con energías sostenibles

“Escuché sobre el Centro de Formación Profesional Wadi Seer de UNRWA a través de mis amigos, y decidí unirme al curso de Paneles solares en 2016. Definitivamente es una especialización increíblemente interesante y tiene mucha salida laboral”, dice Mahmoud, refugiado de Palestina en Jordania de 20 años.

Mahmoud es uno de los 70 estudiantes actualmente matriculados en el curso de Construcción, mantenimiento e instalación de paneles solares del Centro de Formación Profesional Wadi Seer, uno de los dos centros de este tipo de UNRWA en Amman, que benefician a aproximadamente 2.400 estudiantes en Jordania cada año. Integrado en el plan de estudios en 2015, el curso provee a los estudiantes de las habilidades y el entrenamiento práctico que necesitan para trabajar con paneles solaresy también complementa los esfuerzos de la Agencia en Jordania por asegurar y promover la provisión de energía sostenible. En los últimos tres años, UNRWA Jordania ha instalado paneles solares en tres de sus instalaciones: la Oficina de Área al sur de Amman, el Centro de Salud del Campamento de Baqa’a y la Escuela Jabal al-Taj. Con la cantidad de luz solar que recibe Jordania, casi 3.000 horas de sol al año, la energía solar es una fuente de energía renovable sin explotar con potencial de transformar el sector energético de Jordania.

Según Khaled Abu al-Hayja, Director del Centro de Formación Profesional Wadi Seer, se estableció este nuevo curso para responder a la creciente demanda de ingeniería de paneles solares en todo el país: “hoy en día, la tecnología de paneles solares es cada vez más popular en Jordania, dados los beneficios económicos que conlleva como por ejemplo la reducción de facturas eléctricas. Como centro de formación profesional y técnica, tenemos que ser capaces de mantenernos al día con el rápido desarrollo de la tecnología y las cambiantes demandas del mercado de trabajo”.

Hablando del nuevo curso, el Doctor Jehad al-Jundi, un instructor técnico superior del centro comenta: “creamos el taller de Paneles solares hace dos años gracias a la experiencia de los alumnos de otros cursos aquí en el Wadi Seer, que se encargaron de la fase de equipamiento: los carpinteros contribuyeron fabricando los muebles, mientras que los ingenieros eléctricos instalaron el sistema eléctrico. Este taller debería haber costado 40.000 JOD, pero logramos que costara sólo 15.000 JOD”.

Para estudiantes como Mahmoud, el desarrollo de habilidades en industrias innovadoras como las energías renovables abre nuevas puertas para su futuro: “una vez que termine mis estudios buscaré trabajo en este campo. No es una especialización muy común todavía, pero el futuro y el mundo entero van en esa dirección”.