Los ataques a la ayuda humanitaria van contra el derecho internacional humanitario
13.03.2025En contextos donde la violencia y los desplazamientos son la realidad de la población, la asistencia humanitaria es fundamental para salvar vidas.
En Gaza, la población necesita apoyo humanitario para seguir adelante tras 16 meses de infierno. Desde que comenzó el alto el fuego en la Franja, el flujo de entrada de suministros había sido continuo y elevado. En total, 2.300 camiones de UNRWA han entrado y nuestros equipos han brindado alimentos a toda la población, además de otros artículos esenciales como medicamentos, tiendas de campaña, lonas o mantas.
Pero la entrada de ayuda vuelve a estar amenazada. El 2 de marzo, las autoridades israelíes anunciaron la suspensión del ingreso de asistencia humanitaria en la Franja, poniendo en peligro los avances logrados hasta ese momento.
“La decisión de Israel de suspender la ayuda en Gaza pone en peligro la vida de la población civil, exhausta tras 16 meses de guerra brutal. La ayuda humanitaria debe seguir llegando a una escala similar a la que hemos visto en las últimas seis semanas, cuando comenzó el alto el fuego, que trajo alivio”, declaraba Philippe Lazzarini, Comisionado General de UNRWA.
Pero los ataques a la ayuda y al personal humanitario por parte de Israel han sido continuos desde octubre de 2023 en Gaza. Nunca, en la historia de Naciones Unidas, había sido tan peligroso trabajar en el sector humanitario.
En la Franja, 275 trabajadores y trabajadoras de UNRWA han sido asesinados desde el 7 de octubre de 2023. Además, gran parte de la infraestructura humanitaria ha sido dañada o destruida, como nuestras escuelas-refugio o las instalaciones sanitarias. En muchas ocasiones por ataques directos.

Estos ataques se han extendido también a Cisjordania. Nuestras oficinas de Jerusalén Este han sido desalojadas. El personal se ha visto obligado a teletrabajar desde Jordania o desde sus hogares.
Los conflictos y la violencia no se reducen al territorio Palestino ocupado, ni los incidentes relacionados con el personal del sector humanitario. El pasado 7 de marzo, uno de nuestros compañeros de UNRWA en Siria fue asesinado. Fue alcanzado por fuego cruzado cuando regresaba del trabajo durante los enfrentamientos en Homs y Lattakia.
Recordamos que el personal humanitario debe estar protegido en todo momento y la asistencia no puede usarse como arma de guerra. Estas acciones van en contra del derecho internacional humanitario.
En UNRWA estamos decididos a resistir y a seguir trabajando para brindar servicios y artículo esenciales a las personas refugiadas de Palestina en Gaza, Cisjordania, Siria, Líbano y Jordania.