La falta de financiación de UNRWA agrava la crisis de vivienda para los desplazados de Yarmouk

La semana pasada, un convoy de UNRWA fue a Yalda, cerca de Damasco para distribuir asistencia humanitaria esencial, incluidos alimentos, mantas y colchones, a 3.000 personas refugiadas de Palestina y a sirios vulnerables que se encuentra allí desplazados de Yarmouk. Antes hogar de 160.000 refugiados y refugiadas de Palestina y símbolo de la comunidad de refugiados palestinos en Siria, el campamento de Yarmouk está casi totalmente destruido. Muchos huyeron sin nada más que la ropa que llevaban puesta cuando en abril estallaron intensos combates y se mudaron a apartamentos vacíos.

“Un motivo de especial preocupación son los refugiados de Palestina que encontraron refugio temporal en hogares anteriormente abandonados en Yalda, Babila y Beit Sahem (YBB), a los que ahora se les pide que los abandonen. A medida que los residentes han comenzado a regresar a estos hogares abandonados, entre 1.500 y 1.700 familias de refugiados de Palestina se ven obligadas a pagar alquiler o directamente a mudarse a otro lugar”, dice Michael-Ebye Amanya, Director Adjunto de Asuntos de UNRWA en Siria. “Las opciones de alojamiento están limitadas por el hecho de que la mayoría de los refugiados de Palestina de Yarmouk no pueden salir de la zona. Necesitan urgentemente una solución a sus necesidades de refugio”.

“En el mes transcurrido desde que dejé Yarmouk, he tenido que mudarme 6 veces”, dice Iman, una madre de 48 años con dos hijas adolescentes. “Mi casa en Yarmouk ha sido destruida por completo; no tenemos nada. Todos los caseros de Yalda piden 25.000 SYP (USD 55) de alquiler, y tenemos que pagar al menos tres meses por adelantado. Esto es dinero que no tenemos; nuestros ahorros se han agotado en los últimos años debido al conflicto y no hay trabajo disponible en Yalda. Además, la asistencia en efectivo de UNRWA está disminuyendo. No tengo ni idea de adónde vamos a ir”.

El mes pasado, UNRWA se vio obligada a reducir su asistencia de emergencia en efectivo en Siria de 32 a 23 dólares al mes por persona debido a la falta de financiación. Esta cantidad no alcanza para que los refugiados de Palestina desplazados puedan pagar un lugar donde vivir. La Agencia se enfrenta a una crisis financiera sin precedentes y a un déficit de 248 millones de dólares para sus operaciones en toda la región. El Llamamiento de Emergencia para los refugiados de Palestina en Siria tan solo ha obtenido un 5% de la financiación necesaria para 2018.

Casos como el de Iman muestran el impacto que tiene la falta de fondos en la vida de la gente común que necesita desesperadamente ayuda. A menos que UNRWA reciba más fondos, está en riesgo la ayuda a más de 400.000 refugiados y refugiadas de Palestina en toda Siria, incluidos los alimentos, la atención sanitaria y la asistencia en efectivo que permite a los refugiados cubrir sus necesidades básicas y su refugio.