Israel rompe el alto el fuego en Gaza y bombardea a la población
21.03.2025Israel ha roto el alto el fuego con ataques indiscriminados, tras más de dos semanas sin permitir la entrada de ayuda humanitaria a la Franja
La madrugada del pasado 18 de marzo, Israel volvió a bombardear a la población civil en varias zonas de Gaza. Más de 400 personas han sido asesinadas, entre ellas más de 170 niños y muchas más heridas. Desde entonces, los ataques por aire y mar continúan, y se teme que lo peor esté por llegar dada la actual invasión terrestre que separa el norte del sur.
Esto ha provocado nuevas oleadas de desplazamientos en medio de condiciones humanitarias desoladoras, tras más de dos semanas de bloqueo a la entrada de suministros humanitarios.
La violencia de los ataques ha sido devastadora. El director del hospital Al Shifa, el doctor Mohammed Abu Silmiyeh, describió la situación como “catastrófica” y aseguró que el número de víctimas era tan elevado como en los primeros días después del 7 de octubre de 2023.
“Había 50 cuerpos en el departamento de emergencias y otros 30 en el refrigerador de la morgue. Las salas de operaciones estaban llenas y muchos heridos murieron ante nuestros ojos sin que pudiéramos tratarlos”, asegura.
El sistema de salud en el norte de Gaza ha colapsado en gran medida y hay una grave escasez de medicamentos y combustible. Algunos equipos médicos se han enfrentado a la imposibilidad de llegar a algunas áreas de la Franja por la falta de vehículos y se han visto obligados a lavar y esterilizar gasas para volver a usarlas, debido a la falta de material.

La población civil de Gaza ha vuelto a enfrentarse al pánico de los bombardeos y al caos. Muchos pacientes fueron trasladados al hospital en carros tirados por animales y han visto morir a seres queridos de nuevo.
Además, una de las sedes de Naciones Unidas en Deir al-Balah, donde trabajaban compañeros humanitarios de UNOPS, ha sido bombardeada. Un miembro del personal internacional ha sido asesinado y cinco heridos, varios de gravedad. Jorge Moreira da Silva, director ejecutivo de UNOPS, afirmó durante una conferencia de prensa en Bruselas: “Todo el mundo sabía quién estaba trabajando dentro de las instalaciones. Era personal de la ONU, de UNOPS. Quiero subrayar que el lugar estaba en una zona aislada. No había otros edificios cerca. Era un local muy conocido (…) En mi opinión, esto no ha sido un accidente”.
También, en los últimos días, se ha confirmado el asesinato de otros cinco miembros del personal de UNRWA, lo que eleva el número de trabajadores y trabajadoras de la Agencia asesinados a 284.
La población de la Franja ha sufrido durante 16 meses una violencia brutal e indiscriminada, desplazamientos, escasez de alimentos y artículos esenciales. “Alimentar el ‘infierno en la tierra’ reanudando la guerra solo traerá más desesperación y sufrimiento”, ha expresado Philippe Lazzarini, Comisionado General de UNRWA.
En UNRWA seguimos trabajando para aliviar el sufrimiento de la población y salvar vidas, pero es imprescindible volver al alto el fuego inmediatamente.