Gaza: Informe sobre la situación (25 Noviembre)
26.11.2012
Situación general
La frágil calma en Gaza parece mantenerse, a pesar de la muerte de un joven palestino cerca de la valla fronteriza en Khan Younis el viernes, lo que ha generado temores de una nueva escalada. El suceso ocurrió cuando un grupo de jóvenes palestinos celebraba el alto el fuego y se acercó a la frontera para rezar y amarrar sus banderas en la valla. Soldados israelíes dispararon contra ellos y además del joven fallecido otros 19 resultaron heridos.
A lo largo del viernes, día festivo, los gazatíes lloraron a sus seres queridos, descansaron y trataron de volver a su vida cotidiana. Las condiciones climáticas –las primeras tormentas fuertes del invierno, fuertes vientos, lluvia y temperaturas bajas- están dificultando esa vuelta a la normalidad para todos los que viven en edificios que fueron total o parcialmente destruidos. Además, muchos no han tenido tiempo para poner plásticos en las ventanas que sufrieron daños durante los bombardeos israelíes para proteger a sus familias contra el viento, el frío y la lluvia. El miedo está todavía instalado entre los habitantes de Gaza que al oír los truenos se sobrecogieron al asociarlos con los ataques aéreos que habían sufrido hasta hace pocos días, algunos pensaron incluso que la ofensiva había comenzado de nuevo.
Las tiendas y oficinas permanecen abiertas desde el sábado y se han reanudado todos los servicios.Más de dos tercios de los túneles comerciales de Rafah han sido parcial o totalmente destruidos y el cruce de Kerem Shalom ha vuelto a reabrir con los horarios que tenía antes de la escalada de violencia, cerrando los viernes y sábados.
Más de 200 personas de diversas organizaciones de países árabes, incluidos médicos, entraron en Gaza a través del paso fronterizo de Rafah durante los días 23 y 24 de noviembre para expresar su solidaridad con el pueblo de Gaza. Una delegación turca compuesta por 16 personas llegaron hasta la Franja a través de Rafah en la mañana del sábado, con más de 30 camiones que transportaban más de 100 toneladas de ayuda alimentaria y la medicina.
Gaza: hechos y cifras
1,2 millones de refugiados
8 campamentos de refugiados
12.000 empleados
245 escuelas para 225.000 estudiantes
21 centros de salud
12 centros de distribución de alimentos para más de 800.000 refugiados
La población vive bajo un bloqueo por tierra y mar desde 2007
Destrucción de la economía local
Necesidad urgente de financiación:
Asistencia alimentaria: 4,6 millones de euros
Asistencia en efectivo: 1,5 millones de euros
Artículos no alimentarios: 0,7 millones de euros
Reparación urgente de las instalaciones y centros de acogida de refugiados: 1,1 millones de euros
Suministros médicos: 308.800 euros
Programa de creación de empleo para apoyar al Ministerio de Salud: 162.120 euros
Combustible: 1,1 millones de euros
Eliminación de residuos y escombros: 77.200 euros
Total: 9,5 millones de euros
Por el momento se han comprometido 2,2 millones de euros pero todavía faltan 7,3 millones.
Situación de la seguridad
La frágil situación de seguridad en Gaza se mantiene estable. No se han registrado represalias al fuego abierto por parte del ejército israelí contra un grupo de jóvenes en la frontera y Hamas, por su parte, ha desplegado fuerzas policiales en las zonas fronterizas para evitar que los jóvenes se acerquen a la valla y pueda provocarse un incidente similar.
La respuesta de UNRWA
De 245 escuelas de UNRWA en la franja de Gaza, 243 de ellas reabrieron sus puertas el sábado, permitiendo reanudar sus clases a unos 223.000 niños refugiados de Palestina. Los niños estaban muy emocionados por regresar a la escuela después de verse obligados a permanecer en casa durante más de una semana.
Los equipos de mantenimiento, junto con las comunidades locales, estuvieron trabajando el viernes hasta altas horas de la noche para que los centros educativos estuvieran listos para recibir a los estudiantes. Las zonas inseguras han sido acordonadas y permanecerán así hasta que puedan realizarse unos trabajos de limpieza más exhaustivos. Las reparaciones menores también se completaron, pero muchas escuelas siguen necesitando que se reemplacen las ventanas destruidas durante los ataques. Si bien la limpieza general de los centros ha concluido, las zonas de arena en algunas escuelas se revelan particularmente difíciles y requieren una mayor atención.
Actualmente, cerca de 1.000 estudiantes que asisten a una escuela de UNRWA en la zona de Tel el Hawa de Gaza fueron trasladados a una escuela adyacente, a la que asistirán durante el segundo turno mientras duren las reparaciones de su centro.En las escuelas de Shejayia Co-ed se dio la bienvenida a más de 2.000 estudiantes. Las aulas se han organizado para acoger a los estudiantes cuyas aulas fueron destruidas y han perdido puertas y ventanas. Mientras tanto, los estudiantes que asisten a las escuelas de Bureij Co-ed han tenido que ser instalados en la biblioteca, la sala de profesores y una sala de almacenamiento, además se han unido varias clases debido a los graves daños que hay en cuatro aulas del centro. Aunque estas soluciones provisionales permiten a los niños asistir a la escuela, la ratio por aula es superior a la que establecen los estándares de UNRWA.
En todas las escuelas de UNRWA se ha verificado cuidadosamente que no ha restos de metralla de los ataques y los disparos de las celebraciones así como restos explosivos. Centro de Acción de Minas de Naciones Unidas (UNMAS) ha realizado una evaluación en cuatro escuelas de UNRWA para garantizar que estos centros, los más dañados, están libres de restos de explosivos.
El sábado, la tasa de asistencia a las escuelas que estaban operativas fue de 87%, esa cifra se ha elevado ya al 95,5%, ya que los estudiantes están regresando poco a poco a la normalidad. Algunos niños que asisten a escuelas de UNRWA presentaban heridas visibles como consecuencia de las hostilidades y otros permanecen en casa para su cuidado o en el hospital. El programa de alimentación escolar en las escuelas también se ha reanudado.
Un total de 180 consejeros han presentado informes de la situación en sus escuelas durante los primeros días de apertura tras la violencia. Se han organizado sesiones de orientación para los profesores para asegurarse de que son capaces de hacer frente a las reacciones de los estudiantes y que no se vean abrumados por sus propias experiencias de las hostilidades.
Las materias regladas se han dejado de lado para que los maestros se tomen su tiempo para dar la bienvenida a los estudiantes a la escuela y proporcionarles oportunidades para afrontar la experiencia que han vivido durante los últimos días. Se han organizado sesiones para los estudiantes, incluyendo actividades recreativas, sesiones de dibujo y deportes. Estas actividades ayudan a los niños a volver a su vida cotidiana y los estudiantes que no responden a este tipo de actividades se identifican para un seguimiento posterior.
Los consejeros están evaluando a los estudiantes para identificar aquellos que se han visto expuestos a graves acontecimientos. La próxima semana, los consejeros incluirán a estos alumnos y sus familias en un asesoramiento individualizado. Por otra parte, también se presta especial atención a aquellos alumnos que no han asistido por el momento a la escuela. Los consejeros continuarán un seguimiento durante los próximos días.
Los 21 centros de salud reanudaron sus operaciones también el sábado. Como se esperaba, tras el anuncio del alto el fuego aumentó el número de visitas de pacientes. El personal de los centros ha tenido que quedarse hasta tarde para abordar la gran carga de trabajo.
Los servicios generales de salud, atención prenatal y de inmunización, especialmente de los niños, han sido muy solicitados después de los días de limitación de la movilidad de la población. Muchas madres no habían podido salir durante las hostilidades, por lo que las vacunas infantiles se tuvieron que retrasar una semana, y por ello están acudiendo a los centros de salud.
Cinco equipos de ingenieros técnicos (15 en total) evaluaron 58 instalaciones de UNRWA para determinar el grado de daños causado durante las recientes hostilidades. Los mayores desperfectos se identificaron en 18 escuelas, dos centros de salud, un centro de distribución y dos oficinas; también se han encontrado daños menores en 28 escuelas, dos centros de salud y cinco oficinas.
Los trabajos de reparación están en marcha para instalaciones con daños menores. Esto incluye el uso temporal de láminas de plástico para cubrir las ventanas dañadas y la reparación de las puertas rotas debido a la fuerza de las explosiones.Solo el sábado, los equipos de emergencia visitaron a 130 familias de refugiados afectados para determinar la asistencia necesaria y proporcionar alivio provisional a raíz de las hostilidades. Como resultado, UNRWA ha distribuido láminas de plástico y lonas a aproximadamente 70 familias.
La Agencia está trabajando en colaboración con la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCAH) y el sistema de grupos humanitarios para evaluar las necesidades que han surgido de la violencia, con UNRWA centrándose en la situación de los refugiados. En particular, la Agencia está trabajando con sus socios para evaluar el impacto de la violencia sobre la seguridad alimentaria, la disponibilidad de vivienda y artículos no alimentarios y la salud mental y las necesidades psicosociales.
Pasos fronterizos
El cruce de Rafah está abierto en el horario normal. El 22 de noviembre, 863 personas entraron en Gaza y 386 personas salió de Gaza, el 23 de noviembre, 889 personas entraron en Gaza y 221 personas salió de Gaza, y el 24 de noviembre, 225 personas entraron en Gaza y 480 personas salió de Gaza. Varias delegaciones y camiones con medicinas y ayuda alimentaria cruzaron a Gaza los días 23 y 24 de noviembre.
Por su parte, el paso de Kerem Shalom se abrió este domingo. El 22 de noviembre, 123 cargas de camión entró a través de la travesía. Y el paso de Erez fue abierto este domingo y el 23 de noviembre.
¿Cómo puede ayudar?
Para apoyar la operación de emergencia de UNRWA en Gaza, puede hacer su donativo aquí
