Es el momento de defender a UNRWA y nuestra humanidad

El reloj sigue corriendo para que se cumpla el plazo límite para que entren en vigor las dos leyes aprobadas por el parlamento israelí contra el trabajo de UNRWA en el territorio Palestino ocupado.

Nunca en la historia de Naciones Unidas un estado miembro había decidido prohibir que una agencia de la ONU haga su trabajo en medio de una catástrofe humanitaria.

Si se aplican por completo, las leyes prohibirían que operemos en el “territorio soberano de Israel”, lo que, para el Gobierno de Israel, implica la Jerusalén Este ocupada, en contradicción con el derecho internacional y las resoluciones al respecto de Naciones Unidas. Además prohibiría también el contacto entre la Agencia y las autoridades israelíes.

Éste es el último de una serie de ataques contra la Agencia que forman parte de un esfuerzo más amplio por borrar la historia y la identidad palestinas.

Si se implementaran estas dos leyes, tendrían un impacto desastroso. Millones de personas refugiadas de Palestina en el territorio Palestino ocupado dependen de UNWRA para sobrevivir. Nuestros equipos en Gaza y Cisjordania, incluida Jerusalén Este, brindan alimentos, agua y artículos y servicios esenciales. Esta asistencia es vital para salvar vidas, especialmente tras el alto el fuego en Gaza.

Este nuevo escenario agravaría el sufrimiento y la terrible situación humanitaria en la Franja y en Cisjordania y el debilitamiento de la Agencia aumentaría la inestabilidad en la región.

En definitiva, está en juego la vida y el futuro de los refugiados y refugiadas de Palestina. Pero no solo eso, también está en serio riesgo la legitimidad del sistema multilateral de ayuda humanitaria y nuestra humanidad.

No hay alternativa a UNRWA. Otras agencias de Naciones Unidas han reconocido ya que no podrían llenar ese vacío ni asumir el papel de la Agencia para brindar educación o atención médica directa.

Es el momento de alzar la voz por UNRWA, de no dejar que el mundo abandone al pueblo palestino. Es el momento de defender nuestra humanidad y el respeto por los derechos humanos.

UNRWA sólo puede ser reemplazada por un Estado Palestino funcional que aborde la difícil situación de los refugiados y refugiadas de Palestina. Esto se puede lograr mediante voluntad política y diplomacia. Es hora de cambiar de rumbo, establecer prioridades y trabajar por la paz. 

Pase lo que pase, en UNRWA tenemos algo claro: nos quedaremos y cumpliremos. Nuestros compañeros y compañeras tienen el firme compromiso de cumplir con el mandato de la Agencia y van a seguir proporcionando asistencia.