search
Hazte Socio Haz tu donativo Con las refugiadas y los refugiados de Palestina
UNRWA España - Actualidad sobre los refugiados de Palestina - ‘El deseo de mi hija es tener una casa y una nevera, en lugar de una muñeca”

‘El deseo de mi hija es tener una casa y una nevera, en lugar de una muñeca”

Asma al-Salal, de 42 años: “las necesidades de mi familia están más allá de mis capacidades para hacerles frente.” Asma es refugiada de Palestina, vive en Siria, y hace un año salió huyendo de Yarmouk en busca de refugio en el campamento de Jaramana. 

Asma es Viuda y depende de la ayuda de sus hermanos para mantener a su hija divorciada, su hijo y a dos nietos. “Sin una fuente constante de ingresos para mi hijo, y sus dos hijos, y el pago del alquiler mensual para nuestra casa, la vida es insoportable”, dice ella. La carne es ahora un lujo inalcanzable, y la familia depende de lo que Asma llama “limosnas”, como dinero en efectivo y la asistencia en especie de UNRWA.

La historia de Asma se repite en demasiadas ocasiones, lo que refleja la profunda necesidad de apoyo de UNRWA entre los refugiados de Palestina. Widad Mohammad Rayan, recibe asistencia trimestral de la red de seguridad social de UNRWA. Después de perder a su marido en un incidente violento en Yarmouk, ahora ella es el sostén de la familia. Tiene dos hijos y depende de la ayuda de sus vecinos en el refugio colectivo. La asistencia en efectivo, dice ella, “me ayudará a sobrevivir con mis hijos en estas difíciles condiciones de desplazamiento y dificultad.”

Para refugiados de Palestina como estos, la vida cotidiana se ha convertido en un permanente necesidad por estirar los recursos que parecen cada vez más limitados para satisfacer las necesidades. Nizar Juma’at, que ha sido desplazado tres veces, ahora comparte un apartamento con sus hermanos. No tienen muebles. “Es muy frustrante y deprimente para nosotros luchar permanentemente por encontrar dinero para cubrir el alquiler de nuestra casa y proporcionar comida para nuestra familia”, dice. La asistencia de UNRWA es útil “pero los precios de los alimentos han subido y los alquileres se han disparado desde que comenzó la crisis”. Le gustaría recibir ayuda mensualmente, lo que ayudaría a pagar el alquiler a tiempo. Sólo comen carne una vez al mes – “no puedo pagar con frecuencia”, dice, “y tenemos que luchar contra el hambre de vez en cuando.”

Manal vive en Adra y nos cuenta que sus hijos se han vuelto más agresivos, y no están yendo a clase. Están traumatizadas y necesitan apoyo psicosocial, que está fuera de su alcance. ‘En Adra, incluso las tiendas de comestibles están muy lejos, y en un viaje, el conductor del taxi donde iba Manal fue baleado por un francotirador. La mayoría de los pasajeros murieron cuando el taxi volcó; Manal fue una de los afortunadas, sólo había sufrido heridas.

Sin embargo, ella se preocupa más por sus hijos. “Ellos han experimentado el desplazamiento y las operaciones militares, y los efectos a largo plazo del conflicto nos preocupan”, dice. Ella y su esposo están tratando de mantener la esperanza de un futuro con vida. “El deseo de mi hija es tener una casa y una nevera”, dice Manal, “en lugar de una muñeca.”

Desde el comienzo de 2014, UNRWA ha distribuido 165.153 raciones de alimentos y ha proporcionado asistencia en efectivo a 104.567 familias en Siria. En Yarmouk, a sólo 350 paquetes de alimentos se les ha permitido entrar desde el 14 de mayo.

Compártelo

https://unrwa.es/actualidad/noticias/el-deseo-de-mi-hija-es-tener-una-casa-y-una-nevera-en-lugar-de-una-muneca/ Click para copiar enlace