Educación de calidad e inclusiva para todo el alumnado, sin excepción

Abdul-Rahman Hamdan es profesor en nuestra escuela Nuseirat en Gaza y dedica gran parte de su tiempo a hacer que las aulas sean más accesibles para todo el alumnado. Le acompañamos a una de sus clases y, muy contento, nos enseña uno de los pupitres con silla adaptados que ha creado con la ayuda de su compañero Shaher. “Utilizamos piezas de sillas rotas y asientos de coches que ya no funcionan”, nos explica.




Teniendo siempre en cuenta la comodidad del alumnado con diversidad funcional, Abdul-Rahman también ha fabricado pupitres móviles y ajustables, y sillas con ruedas que permiten la movilidad en periodos de clase muy largos. “La fabricación de cada pupitre cuesta aproximadamente 50 dólares e incluye materiales reciclados”, nos explica Abdul-Rahman. En comparación con el coste de pupitres y sillas adaptadas nuevas (entre 350 y 400 dólares), Abdul-Rahman ha sido capaz de economizar los recursos de las escuelas sin que eso suponga una menor calidad.




UNRWA promueve un sistema educativo inclusivo que reconozca el esfuerzo y aprendizaje de cada uno de los alumnos, independientemente de sus condiciones. Asegurar espacios accesibles y adaptados significa terminar con las barreras que encuentran algunos niños y niñas en el acceso, el aprendizaje, el desarrollo y la participación en las aulas.




En 2017, UNRWA publicó su Guía de Inclusión de Personas con Diversidad Funcional que tenía por objetivo desarrollar las capacidades de todo el personal educativo para adaptar los espacios a todos los alumnos y alumnas. A día de hoy unos 200 trabajadores de UNRWA han recibido formación sobre cómo aplicar estas directrices y, desde entonces, 299 personas con diversidad funcional en riesgo de exclusión se han beneficiado de la asistencia.




Además, a finales de 2017, UNRWA abrió nuevos espacios de ocio inclusivos en el campamento de Rashidieh, al sur de Líbano, y, a través del Programa de Apoyo al Aprendizaje, UNRWA también ha dado apoyo a niños y niñas con diversidad funcional y dificultades de aprendizaje.




A través de los procesos de detección de problemas de salud para niños de entre 1 y 3 años, la Agencia puede identificar en edades muy tempranas posibles complicaciones. En total, el Programa de Diversidad Funcional de UNRWA ayuda a 13.143 refugiados palestinos con necesidades especiales dándoles acceso a servicios de rehabilitación y apoyo específicos.