Más casos de traumas psicológicos en Gaza
23.01.2013
En la franja de Gaza han aumentado notablemente los casos de traumas psicológicos y estrés postraumático tras la reciente ofensiva militar. Según las últimas cifras recogidas por UNRWA, la mayor organización humanitaria que trabaja con la población en la Franja sobre el terreno, la incidencia de estos casos se ha incrementado en más del 100%.
UNRWA señala que en la actualidad el número de personas que reciben tratamiento psicológico se ha duplicado respecto al mes de noviembre. Y casi la mitad de ellos, concretamente el 42%, tiene menos de nueve años.
Estos últimos datos, obtenidos a partir de los casos que se han registrado en las instalaciones sanitarias de UNRWA, apoyan las conclusiones de un estudio elaborado por Unicef sobre la situación de los niños de Gaza. La Agencia de la ONU para la infancia señala la relación del aumento de casos con trastornos psicológicos entre los menores y las situaciones de conflictos armados.
“Estas cifras representan un aumento significativo de los problemas de salud mental”, informa Akihiro Seita, director del programa sanitario de UNRWA. “Desde mi experiencia, esto evidencia una epidemia de estrés postraumático”. Seita recuerda además que “estas estadísticas solo reflejan una muestra de la realidad, lo que sugiere que hay un gran número de casos que no han sido detectados”.
Problemas del habla y trastornos del sueño
“En mi primera visita a Gaza después de la ofensiva, me sentí abrumado por la cantidad de madres y niños que han sufrido la magnitud de los bombardeos. Todas las madres que conocí en los centros de salud de UNRWA me dijeron que sus hijos se comportaban de un modo distinto después del conflicto. Tras los ataques, algunos de ellos no duermen bien, tienen problemas alimentarios o tienen alteraciones en el habla. Es desgarrador”.
Tras los ocho días de ofensiva, Unicef publicó los resultados de una evaluación psicosocial rápida sobre la situación de los niños en la franja de Gaza. Este estudio reveló que: se había producido un aumento del 91% en los trastornos del sueño entre los menores, el 84% de los encuestados aseguraba sentirse “aturdido”, y el 85% confesó sufrir “alteraciones de apetito”.
En el último informe que UNRWA presentó a la Asamblea Mundial de la Salud en mayo de 2012, la Agencia recogía pruebas de un aumento de los “trastornos relacionados con el estrés y los problemas de salud mental” entre los refugiados de Palestina. En respuesta a estas necesidades crecientes, UNRWA ha puesto en marcha un nuevo modelo de atención sanitaria llamada Family Health, mediante el que las familias de los refugiados de Palestina reciben atención sanitaria integral e individualizada, siempre con el mismo equipo médico.
“UNRWA está intensificando su asistencia psicosocial en las escuelas y a través de visitas domiciliarias en respuesta a este fuerte aumento de los casos de trastorno de estrés postraumático”, dijo el portavoz de la UNRWA, Christopher Gunness, al tiempo que solicita más fondos para satisfacer la creciente demanda de trabajo de salud mental de UNRWA.
“Nuestro programa de salud mental comunitario en Gaza cuesta unos 2.262.000 euros anuales”, dijo Gunness. “Para satisfacer la creciente demanda de atención de salud mental necesitamos desesperadamente más fondos”.
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