“La asistencia en efectivo de UNRWA me ha permitido crear un futuro mejor para mis hijos”

La historia de Hassan es un bonito recordatorio de que, en medio de la adversidad en Siria, la esperanza puede nacer

En el bullicioso barrio de Mlaiha, cerca de Damasco, en Siria, la esperanza se abre paso en medio de la adversidad que enfrentan innumerables personas refugiadas de Palestina.

La historia de Hassan Hashem, un conductor de camionetas de 34 años es un ejemplo de que el poder de la determinación y la dignidad es crucial frente a desafíos abrumadores.

Hassan nació en Damasco y tuvo que hacer frente desde niño a grandes dificultades e inconvenientes. Abandonó la escuela en séptimo grado y a los 13 años comenzó a trabajar para sacar adelante a su familia. Primero, ayudó a sus padres y hermanos y más tarde se casó y tuvo dos hijos, por lo que sus obligaciones económicas crecieron.

Todo se complicó a raíz del estallido de la guerra en Siria, en 2011. Las condiciones socioeconómicas de las personas refugiadas de Palestina se agravaron y sus medios de vida se vieron muy comprometidos. Hassan sufrió la crisis económica de primera mano y tuvo que esforzarse mucho para cubrir las necesidades más básicas de su familia. Aún tiene muy presente ese sufrimiento.

Pero su compromiso con el bienestar de su familia fue más fuerte que los desafíos diarios. Hassan, además, tuvo un apoyo fundamental: la asistencia de UNRWA. Para la familia fue un salvavidas que les permitió acceder a alimentos y artículos esenciales como ropa o productos de higiene.

“La asistencia en efectivo de UNRWA no solo me ha brindado alivio, sino que también me ha permitido crear un futuro mejor para mis hijos, al ayudarme a satisfacer sus necesidades”, asegura Hassan.

Más de 426.000, de las 438.000 personas refugiadas de Palestina en Siria, reciben asistencia en efectivo de UNRWA. Les aporta la capacidad y la dignidad para tomar sus propias decisiones en lo que respecta al gasto familiar y a su vida diaria. Además, es una forma de favorecer el desarrollo de comunidades desfavorecidas.

La historia de Hassan es un bonito recordatorio de que, en medio de la adversidad, la esperanza puede nacer. Su historia no es única. Muchas familias refugiadas de Palestina en Siria han tenido experiencias muy similares y todas ponen en relieve la importancia de UNRWA, ya que trabajamos para proporcionar alivio a las familias, pero también para construir un futuro mejor.