Khalil: “Mi discapacidad visual no me impedirá ser veterinario”

Khalil Al-Safouri sufre una discapacidad visual y es estudiante en la escuela Ein al Asal de UNRWA en Líbano. Khalil fue diagnosticado con una discapacidad visual cuando nació y esto tuvo consecuencias directas sobre su rendimiento académico en los primeros cursos escolares. Para él era muy difícil diferenciar las letras del alfabeto y leer.

A pesar de todas las dificultades, Khalil siente una gran motivación hacia el conocimiento: “Considero que la educación es una de las cosas más importantes. Es la única forma de construir un futuro mejor. Me he enfrentado a grandes desafíos en el camino para alcanzar mis sueños pero nada podrá impedir que dé lo mejor de mi”, dice.

Para Khalil, sus orientadores escolares de UNRWA, Abed y Lina, han sido personas fundamentales en su recorrido escolar. “Adoro mi escuela por la amabilidad y el cariño que recibo de mi orientador y mis maestros”, explica Khalil. “También valoro el apoyo y la paciencia que mi profesor de geografía me muestra todos los días. La maestra Sanaa, que siempre juega conmigo y con mis amigos, es la mejor. Este apoyo me ha ayudado enormemente a enfrentar los desafíos en mi vida”. Mientras nos habla, no deja de sonreír detrás de su pequeño libro de Braille.

“Me encanta cuidar a los animales y sueño con ser veterinario algún día. Quiero ser el mejor. Un veterinario que cuide a los animales en el campamento. Este es mi sueño.” Continúa, “¡No solo me apoyan mis maestros, sino también mis compañeros de clase! Siempre me incluyen en las actividades extraescolares. Me encanta el espíritu de amabilidad y compañerismo que me demuestran”, dice.

Khalid, como lo describe su maestra Sanaa, es un niño inteligente, activo y elocuente. Se relaciona con sus amigos en la clase, discute y tiene iniciativa. Su confianza en sí mismo es única y no es común en los niños de su edad. “Realmente merece atención y cuidado”, reitera su profesora Sanaa, “Trabajamos mucho para ayudarlo en todo lo que podemos para que alcance sus sueños”.

A pesar de la crisis de financiación que la Agencia atraviesa desde el año pasado, UNRWA pudo abrir a tiempo las puertas de sus 711 escuelas en todo Oriente Medio.